Presión arterial: ¿Qué representa y cómo medirla?
Medir la presión arterial hace referencia a la fuerza con la que el corazón bombea la sangre a las arterias, es de gran importancia realizar esta valoración, ya que de este modo estarás alerta a algún descontrol que se pueda generar en tu presión arterial.
Para ello, solo debes hacer uso de un medidor arterial que arrojará resultados que te indicarán si tu presión sanguínea se muestra alterada o si se mantiene en el rango normal.
Dicha medición la puedes hacer desde casa o en el centro médico más cercano. Los resultados se pueden apreciar de la siguiente manera:
- Presión sistólica (alta): Es el que podemos ver en la parte superior, es decir, la primera cifra que se muestra, este es el resultado de la presión sobre las arterias cuando el corazón late. Un resultado óptimo va desde 120 a 130, en este sentido, de 140 o más, indica que debes acudir prontamente a una cita médica para evaluar con el proveedor de salud, una posible hipertensión.
- Presión diastólica (baja): Esta se muestra en la parte inferior, arroja el resultado de la presión sobre las arterias cuando el corazón está en reposo entre latidos. Cuando el resultado se lee de 80 a 90, forma parte del rango normal, pero cuando está entre 80 a 120, significa una alerta en la que debes tomar acción, acudiendo lo más pronto posible a una cita médica para descartar cualquier riesgo.
¿Para qué se mide la presión arterial?
La lectura de la presión arterial se usa para hacer seguimiento y disminuir el riesgo de una posible alteración a los rangos normales de presión arterial. Es decir:
- Hipertensión: Presión arterial alta que puede conllevar a problemas de salud complejos que ponen en riesgo la vida, como lo son: problemas cardíacos, o un ACV (accidente cerebrovascular). Generalmente, cuando se tiene hipertensión no se manifiestan síntomas.
- Hipotensión: Presión arterial baja, aunque es poco frecuente, a diferencia de la hipertensión, esta si manifiesta algunos síntomas, tales como: mareos, palidez, piel fría y sudorosa, desmayo y debilidad.
Dicha valoración suele ser parte de la cita médica de rutina, la misma no requiere de ninguna preparación, solo mantenerse en descanso durante al menos cinco minutos y tomar en consideración no haber consumido cafeína, estar en calma (no estresado), no fumar durante al menos 30 min antes y no haber realizado ejercicio antes de la prueba, ya que pueden alterar los resultados.
Es importante destacar, que los expertos en salud sugieren que dicha medición se realice a partir de la mayoría de edad, al menos una vez cada dos años, sin embargo, cuando presentan algún factor de riesgo será necesario realizarla anualmente o según las indicaciones de tu médico.
¿Cómo se mide la presión arterial?
La medición de la presión arterial se lleva a cabo de la siguiente manera:
- Siéntate cómodamente en una silla con la espalda apoyada, los pies deben estar en el piso a manera de que el cuerpo tenga soporte.
- Busca una posición en la que el antebrazo quede al nivel del corazón.
- Se envuelve el tensiómetro cómodamente que no apriete alrededor del brazo, la parte inferior debe estar a 2.5 cm por encima del doblez del codo.
- El mango se inflará rápidamente, luego de que ya sea bombeado con la pera, sentirás opresión alrededor del brazo.
- La válvula se abre ligeramente y la opresión irá descendiendo poco a poco.
- Al ir bajando la presión, se registrará la lectura, apenas inicie a escucharse el sonido de la sangre pulsando, esta es la presión sistólica (a la comúnmente le llamamos tensión alta).
- A medida que el aire salga, los sonidos irán desapareciendo. Se registrará puntualmente cuando el sonido se detenga, esta es la presión diastólica (también le llamamos tensión baja).
Nota: Inflar el mango de manera inadecuada puede ocasionar una falsa lectura o en su defecto, no poder medir la presión arterial, es por ello que se debe realizar de la mano de un proveedor de salud, quien te indicará cómo ejecutar el proceso de forma correcta para llevar a cabo la medición. Generalmente, este procedimiento tarda tan solo un minuto y se puede repetir las veces que requieras.
Desde tu casa también puedes monitorear la presión arterial, ya sea con un tensiómetro analógico o uno digital (que es más fácil de manipular). Este control debe ir de la mano con tus citas médicas regulares, en las cuales, el profesional de la salud te indicará la manera adecuada de hacerlo y cada cuanto tiempo, a fin de determinar si la afección ha disminuido o empeorado.